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martes, 9 de marzo de 2021

Creación de Descripciones 2 - Descripciones físicas

   Bienvenidos una vez más a esta sección. La semana pasada nos embarcamos en la emocionante aventura de las descripciones y hoy seguiremos esa senda. A la hora de tratar este tema hay muchos factores para tener en cuenta y, siguiendo la clasificación propuesta con anterioridad, empezaremos hablando de las Descripciones físicas. ¿Listos? Vamos allá.

¿Por qué son tan importantes?

    Dicen que la primera impresión es la más importante, una verdad esencialmente pura y objetiva en la literatura, ¿quién no se engancha a un personaje bien presentado? Si bien es importante que encariñarse o no con un personaje depende de su historia, la primera cita con el lector es el primer paso para lograr el éxito en esta empresa. Miradlo de esta forma: todos tenemos un personaje favorito, uno que empoderamos por encima de cualquier otro o que seleccionamos automáticamente como el predilecto en la historia, pero ¿acaso no se debe todo a la presentación de este?

    Visto desde otro ángulo, como lectores estamos en las manos del autor (o el narrador, en verdad son la misma cosa) y él decide que personajes conocemos antes, después o en última instancia. Por supuesto, la sorpresa en este punto está garantizada, ya que resulta imposible (a no ser que se hayan dejado pruebas de ese momento) saber cuando conoceremos a nuevo personaje. En otras palabras: el primer vistazo o interacción con un personaje es de suma importancia. Dicho así parece fácil de lograr, ¿verdad?, pero no es tan fácil el cuento como se narra.

Consideraciones a la hora de hacer descripciones físicas:

    Antes de entrar directamente en materia, hay que tener en cuenta una serie de cosas antes de ponernos a describir. Como bien dice el refrán: “más vale pájaro en mano que ciento volando”, una frase que a la hora de escribir se resume en una única palabra: preparación.

· Dale forma en tu mente antes de escribirla: El primer paso por excelencia es valeros de vuestra arma más poderosa en la tarea: vuestra mente, el lienzo sobre el que dais su primera forma a vuestra historia. Ahora bien, esto sigue un objetivo que no es la descripción final, sino el acercamiento a esta; en otros términos: sería como hacer el perfil del personaje a describir y completarlo siguiendo un orden (algo que tocaremos más adelante).

Para entenderlo mejor vamos con un ejemplo: ¿recordáis juegos infantiles como “quien soy” o “ponerle la cola al burro”? El proceso es algo parecido, pero indudablemente con un matiz más serio. Si imaginas el relieve o la forma básica (aspecto físico corporal) de la persona a realizar y tenéis en cuenta una serie de elementos (partes de la cara, rasgos físicos destacables, ropa), solo tenéis que ponerlos en orden y darle forma poco a poco. Sí, se que suena fácil de hacer y la realidad es otra bien distinta, pero el resultado no es para menos.

· Describe la persona, no su personalidad: Teniendo ya ese esbozo mental del personaje, va siendo hora de darle forma física dentro de la historia; sin embargo, antes de hacer eso hay que tener presente lo siguiente: si bien es cierto que aspecto físico y personalidad son complementarias, también es recomendable trabajar primero la apariencia antes del comportamiento. ¿Por qué digo esto? Vamos con un ejemplo: imaginad que tenéis muchas ganas de introducir a un personaje, que os encanta su forma de ser y os apresuráis hasta el punto de hablar de su forma de ser, descuidando su apariencia. Al hacerlo así, los lectores no solo no sabrán con exactitud como es vuestro personaje, tampoco serán capaces de enfatizar con él al desconocer su aspecto (y eso es un error gravísimo que hay que evitar a toda costa).

Siguiendo el orden tradicional, el aspecto físico en su totalidad es la primera parte inevitable en toda descripción física, seguida inmediatamente de la personalidad, mas en este caso enfoquémonos solo en la apariencia (ya en futuras entradas tendremos tiempo de trabajar en las descripciones personales).

· Es un primer contacto, haz que merezca la pena: Como ocurre en estos casos, la impresión inicial es muy importante y resulta clave para atrapar al lector. Después de todo, no olvidemos que el hecho de que nuestros personajes sean capaces de calar en el lector depende de cómo los presentemos, es decir, de la forma en que llevemos al lector a través de las páginas hasta esa primera cita.

Por supuesto, este momento es memorable y hay que darle la importancia que tiene, lo que nos lleva a una pregunta trampa: ¿todos los personajes merecen el mismo nivel de atención-descripción? La respuesta, sin importar que sean principales o secundarios, podría ser un simple “sí”, pero sería una solución a medidas. Más que una cuestión de categorización e importancia, el truco radica en como queremos presentarlos nosotros. ¿Sois capaces de poner a unos personajes encima de otros? ¿Menospreciar a una mayoría para que unos cuantos elegidas tengan todo el cariño? Aquí la respuesta solo la sabéis vosotros.

No obstante, mi recomendación al respecto es la siguiente: habéis creado un número determinado de personajes y un nombre conlleva un significado, una función, ¿para qué dar nombre a actores que no os importan? Desde el mismo momento en que los nombrasteis por primera vez dejaron de ser figurantes en la trama para ser participantes de plenos derecho, así que no los dejéis en el banquillo, presentadlos como se merecen. Ellos os lo agradecerán y, por añadidura, los lectores también.

· Usa el léxico adecuado: Sin duda una de las partes más complicadas (a la par que molestas en función de cada uno, ¿para que negarlo?) es hacer uso del vocabulario específico para cada parte, porque claro, no es lo mismo describir un ojo que hablar del pelo o del rostro. No os engañaré, aquí hay que tirar de recursos y preparación inicial más que en cualquier otra cosa, ya que sin hacer uso de ese léxico específico para cada parte no solo no se entiende lo que describís, tampoco tiene el sentido realista que debería.

Lo mejor en este caso es tirar de listas, cuantas más mejor, y diseccionar por partes cada pequeña parte de la descripción física: partes de la cara, expresiones faciales, forma y altura del cuerpo, tipo de ropa, etc. Sí, requiere un trabajo y un tiempo precioso, pero la buena noticia es que solo tendréis que buscar todo ese vocabulario una única vez. Fácil, bonito y barato, ¿verdad?

· No olvides incluir la descripción física en la ficha de personaje: Escribir es algo que se disfruta, de eso no hay ninguna duda, pero muchas veces os machacareis de más por no ir sobreseguro y querer terminar la sesión de cada día antes de tiempo. Todo depende de como queráis hacerlo, mas no por ello no dejaré de insistir en un pequeño detalle: las fichas de personajes no están por capricho y son el mejor recordatorio que podéis tener, ¿por qué no darles un buen uso?

Pongamos un ejemplo: imaginad que habéis presentado un total de 8 personajes en los primeros seis capítulos, pero habéis olvidado por encima la apariencia del personaje número 3 y estáis en un callejón sin salida. Frente a este problema solo hay dos soluciones: a) buscar el capítulo en cuestión donde lo describisteis y hacer copia-paga para recordarlo; b) escribir esa primera descripción en la ficha de personaje y poder recurrir a ella con total comodidad. En vuestras manos queda la elección que hagáis, pero en lo personal prefiero la salida segura (b) a la chapucera (a).

· Se original: Como se suele decir todos somos diferentes y cada uno tiene su manera de hacer las cosas, algo que se agradece especialmente en la literatura para no acostumbrarnos a un estilo y encasillarnos en este. Si bien es cierto que hay pautas, maneras, formas o ordenes determinados para hacer las cosas, esas no son las únicas salidas. ¿Queréis empezar describiendo un aspecto concreto del personaje? Hacedlo. ¿Lo primero que queréis destacar es su pelo? Sois libres de hacerlo.

A fin de cuentas, si algo bonito tiene la escritura es que, más allá de las reglas ortográficas, todo está permitido y cualquier cosa es posible. No dudéis en hacer las cosas a vuestra manera, disfrutad del proceso como os nazca hacerlo. Después de todo, la libertad es la consigna por excelencia de la literatura.

· Las descripciones una a una y por separado: Suele pasar que a veces surge la necesidad de meter a varios personajes a la vez y eso no solo es un quebradero de cabeza, también es un problema en cuanto a la manera de hacerla. Recordad que las prisas nunca son buenas consejeras y que dos son multitud, así que no caigáis en ese error. Las descripciones siempre hacedlas de principio a fin y luego pasad al siguiente, ya que no solo es confuso describir a dos personajes a la vez si no que, además, en función de como se describan se puede ir desde el desconocimiento a la frustración en el lector (cosas que se deben evitar a toda costa).

Pongamos un ejemplo: en determinada escena de la historia X aparecen tres personajes juntos y no hay forma de eludir ese hecho, así que es hora de seleccionar el orden en que se introducirán (valido desde el uno por párrafo a destacar lo más llamativo de cada uno o a compararlos entre sí, todo se vale mientras se describan correctamente). De hecho, la mejor forma de salir de un atolladero como este es ir a vuestra autora de referencia y buscar una escena semejante. Eso no solo os ayudará a tener un ejemplo a emular, también hará mucho menos frustrante el proceso y evitará cualquier síntoma de ansiedad o dudas.

Pautas que seguir:

    Bien, una vez tocados los puntos anteriores ha llegado el momento, ¿listos para empezar con las descripciones físicas? Para empezar, hay que tener clara la división de esta clase de descripciones, concretamente tres partes diferenciadas:

· Cara: En primer lugar, aquello que llama la atención nada más ver a alguien es su cara, no solo por ser el primer elemento que captan nuestros ojos sino también por ser la que revela más información sobre esta. Ahora bien, sin duda es la que contiene más elementos en la descripción y requiere una mayor cantidad de vocabulario. Estos son:
  • Forma de la cara: Destacable a primera vista y un factor clave para diferenciar un rostro de otro, el vocabulario en cuestión se referirá a complexión (delgada, rellena) y forma (redondeada, alargada, cuadrada).
  • Ojos: El espejo del alma y un reflejo claro de las emociones del personaje. Es importante tener en cuenta color (verdes, castaños, azules), tonalidad (claros, oscuros), tamaño (grandes, pequeños), forma (saltones, hundidos); así como lo que nos puede expresar su mirada (perspicaz, astuta, inteligente).
  • Nariz: Al respecto hay que tener en cuenta tamaño (pequeña, grande) y forma (ancha, fina, afilada).
  • Boca: Visualmente sugerente y fácil de destacar, los factores para tener en cuenta son tamaño (pequeña, grande), tipo de labios (gruesos, finos, rellenos) y dientes (rectos, blancos, torcidos, amarillentos); así como vello facial (barba, bigote) y complementos bucales (aparato, fundas).
  • Orejas: No se suelen describir, pero nunca está de más saber que existe esa personalidad. Se tienen en cuenta tamaño (pequeñas, grandes) y forma (abiertas, cerradas, alargadas, finas).
  • Pelo: Da mucho juego a la hora de la descripción y permite una gran diversidad en cuanto a creación se refiere. Entra en juego color (rubio, castaño, pelirrojo), tono (claro, oscuro), tipo (rizado, liso, ondulado) y peinado (flequillo, coleta, trenza, suelto).
  • Color de piel: Algo fácilmente destacable y referente al tono de piel (blanca, oscura, pajiza).
  • Marcas faciales: Por último, cabe destacar las marcas en la piel (lunares, granos, pecas) y los elementos resaltables (cicatriz, parche, quemadura). También se incluiría aquí el uso de gafas.
· Cuerpo: A continuación, lo siguiente a destacar es la apariencia corporal (en otras palabras, físico). Con una serie de pautas, pero con menos elementos que el rostro, lo destacable de este es:
  • Complexión: Referente a la constitución física, se refiere tanto a la forma (delgado, gordo) como a la musculatura (fibroso, musculoso, escuálido, enclenque).
  • Altura: Fácil de señalar y describir (alto, bajo, canijo, gigante).
  • Manos y pies: Algo que se suele pasar por alto y dice mucho de la persona. Respecto a las manos, influye el tamaño (pequeñas, grandes), forma (alargadas, rellenas, gruesas) y apariencia (suaves, curtidas, peludas). Respecto a los pies, cabe señalar tamaño (pequeños, grandes) y forma (alargados, anchos). Además, en ambos casos también se puede hacer alusión a las uñas (si bien no suelen destacarse).
  • Brazos y piernas: En última instancia, y sin tener en cuenta la altura, ambos pueden ser largos o cortos (un detalle quizás menor, pero no por ello menos destacable y que puede dar juego).
· Vestimenta: Por último, suele ser la ropa lo que revela información sobre el personaje y deja entrever detalles sobre sus gustos y personalidad. A diferencia de los puntos anteriores, este requiere conocimientos de moda y un léxico mucho más completo (sin embargo, depende de cada uno. En lo personal, no describo las prendas con exactitud a no ser que sean algo clave del personaje). Sin más preámbulos, aconsejo destacar:
  • Ropa: Aconsejo seguir el siguiente orden: parte superior (camisetas, chaquetas), parte inferior (vaqueros, pantalones) y calzado (calcetines, zapatillas, zapatos, sandalias). No olvidéis hablar del color y estado de la ropa (más importante incluso que el estilo de estas, lo importante es que el lector conozca como va vestido el personaje, hacer una pasarela de moda ya depende de cada uno).
  • Complementos: Por último, si llevan algo destacable no está de más señalarlo (collares, pulseras, colgantes, pendientes). Eso sí, hay que tener en cuenta donde se dan esos complementos y incluirlos al mismo tiempo que se describe la parte pertinente.

Consejos para tener en cuenta:

     Una vez llegados a este punto, solo resta dar unas cuantas pinceladas al respecto sobre este tema. Estas son mis últimas recomendaciones al respecto:

· Tómatelo con calma: Recordad que nadie nace sabiendo y que los primeros pasos siempre son los más difíciles, por lo que no vayáis a saco y os forcéis más de lo que debáis. Sí, entiendo esas ganas de querer incluir a un personaje y decirlo todo sobre él, pero no olvidéis que lo que sentís en ese momento y como escribáis influye directamente en lo que transmitís. Es mejor hacer las cosas despacio y relajados a que las prisas os consuman. Como dice el dicho: “paso a paso y con buena letra”.

· Trata de imaginar a todos y cada uno de los personajes: Antes de decidiros a introducirlos en la historia, es importante que sepáis de antemano como son y tengáis una imagen clara de ellos, y ya si los incluís en sus fichas correspondientes tanto mejor. Nunca está de más ser previsores y ahorraros problemas futuros con ello, cuanto más os preparéis para el proceso tanto mejor para vosotros.

· Recuerda que las descripciones no se acaban una vez introducido el personaje: Cierto es que la primera impresión es la más importante, pero eso no quita que solo tengáis que hacer una descripción en toda la historia; ¡por supuesto que no! Hay miles de oportunidades para describir a vuestros personajes y ningunas de ellas está libre de aparecer: luchas, conversaciones secretas, confrontaciones, etc.… Ya veis que el abanico es amplio, pero ahí no acaba todo.

También influye mucho la clase de situación en la que se encuentren o la actividad que estén haciendo. A fin de cuentas, las descripciones son la ventana que le ofrecéis al lector, ese vistazo a la realidad de la historia que le permite imaginarse todo, así que todo es perfectamente descriptible y, de hecho, debe hacerse una descripción siempre que sea necesario.

· El entorno influye en el aspecto: Otro factor nada desdeñable en cuanto a lo que el tema se refiere es la influencia del entorno, ¿es igual un personaje bajo la luz del día que en la penumbra de la noche? ¿Resaltará los últimos momentos del atardecer sus rasgos más que el brillo de la luna? Son preguntas que, llegado el momento, pueden cambiar completamente una descripción y es por ello qué hay que ser muy conscientes del entorno.

Es más, dependiendo del género el entorno puede tener una mayor o menor importancia: ¿cuántas novelas románticas no juegan con la iluminación en las escenas? ¿Cuántos usos distintos de la oscuridad garantiza el terror? El juego está servido, los recursos son siempre vuestros.

· Ten en cuenta la procedencia o la raza: Entrando en el tema de la creación de personajes, y directamente relacionado con el género, es muy importante no pasar por alto dos factores clave: por un lado, la procedencia de los personajes, que no solo nos brindan información de ellos sino que, además, también pueden ser un buen punto de partida para tener en cuenta una serie de rasgos comunes (sin ir más lejos, yo mismo me he informado sobre los rasgos propios de X etnias para una de mis novelas); por otro lado, ya entrando en la temática de la fantasía y solo si no se tratan de razas humanas, el aspecto y la caracterización física dependerá totalmente de cómo hayáis construido la raza en cuestión.

Puede parecer algo sencillo de asumir o que sería imposible olvidar, pero es tan fácil, tan sencillo caer en el error que no puedo menos que señalarlo. Recordad: sed conscientes de todo lo que podáis sobre vuestra historia, cada pequeño fallo o descuido pueden ser fatales.

· No escatimes en vocabulario: Lo he señalado anteriormente y lo vuelvo a decir ahora: el vocabulario es sagrado, indispensable, totalmente necesario y vuestra mayor baza a la hora de describir. Sí, podéis tiraros a la piscina con lo puesto y ver que sucede, pero nada garantiza que no os choquéis con una pared o que vuestras descripciones no sean capaces de llegar a los lectores. Un trabajo bien hecho es un trabajo bonito, eso no hay quien lo niegue y en literatura es, prácticamente, una ley no escrita.

· No olvides las emociones: Por último, otro factor que va a interceder por vosotros a la hora de describir son las emociones de los personajes, tanto a nivel personal como físico, pero enfoquémonos en este último por ahora. Sentimientos como la rabia, la pena o la alegría pueden cambiar completamente la expresión de un personaje, y eso hay que reflejarlo en la descripción. Seamos sinceros, a nadie le gusta que todos los personajes tengan cara de póker y no tengan expresividad facial, ¡aplicad los cambios en sus rostros, por favor!

    Eso es todo por hoy. Nuevamente, muchas gracias por leerme y nos vemos la semana que viene con la siguiente entrada. Hasta pronto.

18 comentarios:

  1. Esta entrada es una de las más interesantes que he leído y me viene genial ahora porque es una cosa, junto con los diálogos, que más me traban. Me lo guardo para releerlo. Un saludo y sigue con esta sección♥

    -VIVIENDO ENTRE HISTORIAS

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    1. Hola, Laura.
      Me alegro mucho de poder ayudarte, espero que te sea útil también el hilo sobre diálogos ^^
      Un gran abrazo

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  2. Pedazo de entrada !!!!!!!! ❤️
    Creo que son súper importantes, sin ellas los personajes no tendrían sentido y cuando te lees una novela de la que apenas sabes es como si no existieran y al final es algo necesario, sobre todo para la imaginación.

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    1. Me alegra mucha que te haya gustado, la verdad es que me gusta currarme cada vez más esta sección ^^
      Las descripciones son algo precioso y muy necesario, cuanto mejor estén hechas mejor :3

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  3. Como en la vida real, la primera impresión cuenta y mucho. Tanto fisicamente como en cuanto a personalidad. Hay que hacer que el lector imagine, pero también que se le den unas pinceladitas al perfil para que tenga color.
    B7s

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    1. Muy cierto, por eso considero tan necesarias las descripciones, pero llevas mucha razón. A veces es mejor hacer un ejercicio de presentación que destripar completamente la historia.
      Besos :3

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  4. Hola!
    De nuevo una entrada muy completa e Interesante que me hace valorar más todavía el trabajo que hay detrás de describir a alguien.
    Personalmente no doy tanta importancia a la descripciones de las personas como cuando estamos ante un libro de fantasía en el que hay que describir el ambiente, el entorno o la historia pero sí hay que ser preciso a la hora de describir a los personajes para que tampoco resulte tremendamente aburrido ni muy cansino ya que hay libros en los que describen de igual manera a los protagonistas que a la gente que se encuentran por casualidad en la calle.
    Besos!!

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    1. ¡Hola!
      Concuerdo contigo, hay que dejar esos matices especiales en las descripciones para darles ese toque que diferencien protagonistas de secundarios, aunque todo depende del enfoque, claro.
      Eso es parte de lo que me mola tanto de las descripciones, el juego que dan en todo momento.
      Besos ^^

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  5. ¡Hola!
    Pues qué entrada tan maravillosa. La verdad es que me ayuda mucho, al igual que todo lo que escribes :). Sí que es cierto que una primera buena impresión es la clave xD. Gracias también por esos puntos tan detallados y sí que es necesario describir siempre que se pueda y se necesite.
    Un beso.

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    1. ¡Hola!
      Celebro que te sea de ayuda, esa es la idea detrás de este hilo.
      De nada, la verdad es que esta sección es como una catarsis, me relaja mucho escribirla y me ayuda a mejorar ^^
      Besos :3

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  6. Hola,
    en esta vida nunca dejas de aprender. Pero es una entrada muy completa para todo el mundo que escribe.
    Un abrazo.

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    1. ¡Hola!
      Muy cierto, la vida es un viaje continuo de aprendizaje.
      Un abrazo :3

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  7. ¡Hola!

    Pues la verdad es que yo no suelo prestar mucha atención a las descripciones físicas, si acaso las que indican algún rasgo peculiar o cosas así, que por el resto me gusta ir por libre y un poco a ciegas a la hora de leer. Me quedo con tu "haz que merezca la pena" y "sé original", o al menos intentar no hacer lo que comentas: poner todas las descripciones seguidas, que eso puede llegar a aburrir y saturar :')

    Interesante post. ¡Un saludo!

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    1. ¡Hola!
      Te entiendo, todo depende de los gustos de cada uno. En mi caso prefiero que haya un buen nivel de descripción, me ayuda mucho a meterme en la historia y no desconcentrarme con facilidad.
      Me alegro de que te hayan gustado esos consejos en particular, considero que lo principal siempre es disfrutar del proceso :)
      ¡Un saludo!

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  8. ¡Hola!

    A mí me gusta mucho describir a mis personajes físicamente, pero lo hago de una manera bastante sutil. En lo de 'sé original' no estoy completamente de acuerdo, pero sí que hay que ir dejando y marcando unos tiempos.

    ¡Nos leemos!

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    1. ¡Hola!

      Es normal, cada uno tenemos nuestro estilo de hacer las cosas y es lo que condiciona el estilo narrativo propio.

      ¡Nos leemos!

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  9. Que guay, a mi me gusta hacer este tipo de descripciones y a veces me inspiro wn gente qje conozco y me encanta hacerlos reales.

    Me encantan estos consejos.

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    1. ¡Hola!
      Me alegro de que te sean de ayuda, la verdad es que me alegro mucho cada vez que leo comentarios así ^^

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